Pues yo a esto diré (contando con la suerte que tengo piscina propia en casa) que los polvos en la piscina con mi parienta siempre han sido satisfactorios y bastante morbosos por el si nos pillaran o nos oirán.
Tengo ya una cierta edad, tampoco mucha y con tres hijos a la espaldas (dos de ellos bebes y mellizos), pero tengo que decir que en las noches de verano, cuando toda la manada esta dormida, el salir con mi mujer a oscuras y en pelotas a la piscina y marcarnos un buen polvo nocturno en el agüita, hace que los días en que toca limpiarla, mantenerla limpia con productos y demas mierdas, merezca la pena tenerla, jajajajaja.